¿Cómo meditar sin ser Hippie?

22/02/2021 19:42

Andrés Leonardo Salas Garcés,
Bolsista PET – Letras
Letras Libras

Existe un parásito en nuestra mente que si no llegas a tratarla podrá incluso matarte. No hay cura para esto, solo tratamientos para controlarla, químicos que se inyectan directamente en tu cerebro que evitaran que se expanda. Pero de igual forma te cepillas los dientes ¿no es así? Un simple acto de higiene corporal que mejorará tu calidad de vida. Sabrás que tus dientes son muy importantes, pero no como tu mente. Este es el filtro por el cuál percibimos nuestra realidad, cuídala y cuidará de ti, descuídala y podrá destruirte. Para una mente en calma, hasta el cuarto más oscuro tiene un cielo azul, para una mente en caos hasta el cuarto con un cielo azul puede invocar demonios, ¿cuántos problemas ocurren únicamente en el interior de tu mente? ¿cuántas cosas te aterran y nunca ocurrirán? ¿cuántos momentos de días hermosos los pierdes por atender a los oscuros contenidos de tu mente? Como una vez dijo el Buda: “¿Quién es tu enemigo? La mente es tu enemigo. Nadie puede lastimarte más que tu propia mente.” Pero también dijo: “¿Quién es tu amigo? La mente es tu amigo. Nadie puede ayudarte más que tu propia mente entrenada.”

Uno de los problemas que tiene la mente es que nunca puede quedarse quieta, si prestamos atención a nuestros pensamientos podemos darnos cuenta de que pasamos la mayoría del tiempo pensando en el futuro sobre cosas que queremos, situaciones hipotéticas, ilusiones. También en el pasado, qué pasaría si mejor hubiese hecho esto y no aquello, recordado, arrepintiéndote, remordimientos, momentos felices, etc. Pero casi nunca pasamos tiempo aquí, el presente, donde tu vida real está ocurriendo.

Entonces, la mente puede ser tu mejor amiga, pero habita en una realidad falsa fabricada de lenguaje, con tu atención rota y dispersa por un ecosistema digital cada vez más hostil para el libre albedrío ¿Qué podemos hacer entonces? La respuesta es muy simple, nada. No hay que hacer nada todos los días durante 15 minutos, o podemos empezar por 10 minutos. Todos los días nos vamos a sentar y vamos a hacer nada, no pensar, no sentir, simplemente prestarle atención a la experiencia consciente.

Fonte: Imagen de Internet*

¿Qué es meditar?

La meditación no es fácil, ni tampoco relajante como lo muestran en las imágenes de Google, en tu mente, lugar de miedos y esperanzas, está lleno de pensamientos que preferirías no mirar, muchos arrepentimientos, muchas inseguridades, temores por el futuro, odios profundos y opiniones negativas de gente cercana… no es fácil ponerle atención a tu mente y mucho menos relajante. Pero nada que sea fácil vale la pena.

Meditar trae muchos beneficios, pero no mencionaré en este apartado, ya podrás buscarlos por tu cuenta después, porque meditar no es un medio para alcanzar un fin, puede que sean buenas las consecuencias, pero la verdadera consecuencia es la meditación misma. Porque si lo haces buscando un beneficio y en media hora no te sientes como un dios, te sentirás decepcionado y dejarás de intentarlo.

Comencemos

–        Escoge un lado de tu casa donde puedas estar cómodo.

–        Escoge una hora donde no tengas nada que hacer.

–        Coloca un temporizador para que no pienses en el tiempo.

–        Siéntate con la espalda recta sin tocar el espaldar de la silla (apenas lo suficientemente incómodo para que logres prestar atención)

–        Cierra los ojos, también podrás hacerlo con los ojos abiertos, pero sin un panorama que te distraiga

–        Escanea tu cuerpo durante unos 30 segundos, de la cabeza a los pies.

–        Escucha los sonidos a tu alrededor como si escucharas música, con atención y curiosidad.

–        Y cuando te sientas listo, ponle atención a tu respiración, siente por donde pasa el aire, no tienes que respirar de una forma diferente ni nada, solo presta atención. La respiración será tu ancla al presente porque siempre está ahí.

–        Evita pensamientos futuros o pasados, si estos llegan acéptalos y déjalos ir, y regresa a la respiración.

–        Uno de los trucos para ayudar a callar tu mente es darle una tarea, y lo que puedes hacer es contar tus respiraciones. Cuenta hasta 10 y comienza de nuevo.

–        Y listo.

No hay nada que lograr, nada que obtener, solo prestar atención.

Referencias:

http://migala.mx/

 

* Descripción de la imagen: una gota cayendo en el agua con pequeñas ondas, fondo anaranjado como un atardecer

Comments

Tags: comunicaPET